«El Aguante» *
El aguante de los juicios de lesa humanidad de Rosario trasciende la etimología de la palabra en sí, es un conglomerado de elementos cualitativos necesarios formados en un proceso de lucha y resistencia, encabezado por los organismos de derechos humanos. El aguante es base y soporte fundamental a la hora que los compañeros y compañeras ingresan al tribunal a dar sus testimonios. El aguante es estímulo para atenuar angustias y temores lógicos de un momento de responsabilidad histórica. El aguante es la vereda llena de cumpas, es paciencia, abrazos y mates, son las fotos de la memoria con la V de la victoria, el puño cerrado y los trapos de fondo, pero sobre todo con muchas convicciones de justicia.
Hoy el aguante se quedó sin nafta, desgaste propio del tiempo transcurrido, sin relevos a la vista. Los compañeros progresistas, combativos o de organizaciones de izquierda levantan las banderas de la memoria, verdad y justicia pero no está en su agenda el aguante. Conquistas ganadas a los jueces, las perdimos.
Esto, a pesar de los reclamos cotidianos. En la sala de audiencias al público hay muchas más sillas vacías que ocupadas, y a veces uno o dos compañeros. Hay juicios que convocan más que otros, y en algunas audiencias, ni familiares del declarante. Las movilizaciones del 24 de marzo y del 2×1 dan muestra que el Nunca Más puede dejar de ser consigna para pasar a ser consciencia colectiva.
El aguante de los juicios de lesa humanidad de Rosario es la actitud solidaria, adaptada y expresada de distintas formas entre los compañeros y compañeras de cautiverio bajo un estado de miedo, confusión y con la voluntad lacerada en la condiciones del horror genocida. Los testimonios de los sobrevivientes en los juicios dan fe de esta versión, por lo tanto el aguante tiene su origen embrionario en las propias barbas de la tortura.
Enzo “Ñato” Tossi
Diciembre 2020
* Testimonio de Enzo Tossi, para el trabajo realizado por H.I.J.O.S. Rosario para «La escuela y los juicios«