Este miércoles declaró en el juicio oral por la causa Feced III, el compañero Enzo Tossi, comunista, ex secretario general del Sindicato de Mosaístas, ex preso político y querellante, y consejero Nacional de APDH Argentina. Es la tercera vez que se sienta a dar su testimonio ante los jueces federales sobre sus detenciones en el Servicio de Informaciones primero y en la cárcel de Coronda después.
Sus compañeros de APDH Rosario lo acompañaron durante este momento y le dedicaron estas palabras en relación al significado de dicha declaración y al gran valor de su testimonio:
“Fue un testimonio altamente político, y a la vez emotivo, concreto y contundente. No se quedó en el simple relato del dolor, sino que hizo un análisis del contexto de la lucha obrera y popular de los 70. Y en ese marco, su detención y calvario, igual o parecido al de tantos/as”, (Norma Ríos – Presidenta de APDH Argentina)
“El testimonio de Enzo fue contundente. Su decir nos llevó a lugares donde la crueldad y el horror lo cubrieron todo. Y en el transcurrir de sus palabras fue recuperando nombres y luchas como ganándole a la muerte la partida. Como sobreviviente de esos tiempos aciagos le dejó finalmente al tribunal la necesaria tarea de hacer Justicia y para eso él puso a su servicio la Memoria y la Verdad preservada por décadas, incorruptible como él mismo lo es”, (Claudia Gotta – Presidenta de APDH Rosario)
“Hoy, frente al testimonio de nuestro compañero Enzo Tossi, sentí un profundo dolor e impotencia. Su hablar en tiempo presente sobre los horrores de la tortura me transportó a cada uno de los lugares que describió. Él, que recordará cada nombre, cada alias de los torturadores y sus actitudes, me reivindicó su imagen metódica. Nunca lo había escuchado declarar. Salí del tribunal con la sensación que la memoria es y será la única que nos salvará de caer nuevamente en las garras de esas bestias. Orgullo y rebelión me invadieron por completo. Aprendí que coraje y corazón tienen tres sílabas y se conjugaron cuando Enzo compartió su experiencia. (Marcela Gentile – Secretaria de APDH Rosario)
“El compañero Enzo cumplió, como siempre lo hizo, con la responsabilidad autoimpuesta de no fallarle a los compañeros que ya no están. Se sobrepuso a las pesadillas que todavía lo persiguen 40 años después e intentó describir el horror de la tortura transmitiendo lo inenarrable. Dejó girones de su cuerpo y alma al atravesar esa maquinaria creada para destruir personas y conciencias, pero no pudieron, no lo quebraron, sigue de pie dando la pelea. (Edgardo Barbero – Secretario coordinador de APDH Rosario).